Cerca de dos semanas alcanzó a entrenar San Luis de Quillota, debiendo paralizar sus trabajos debido a la cuarentena decretada para la ciudad. Con el permiso especial concedido a los clubes para que retomen los entrenamientos -medida anunciada por el gobierno el lunes pasado- el cuadro canario retornó hoy a las prácticas, pensando en un reinicio de campeonato que se adelanta, podría darse en la segunda semana de agosto.
A la espera de la fecha de confirmación para el retorno a la competencia, en el club deben zanjar además, otro tema. La localía que ejercen en el Lucio Fariña de Quillota, no está garantizada y es muy probable que deban recurrir a otro recinto. Esto, porque el estadio está siendo utilizado como centro de atención sanitaria en medio de la pandemia. Tal como ocurre en Chillán con el Nelson Oyarzún Arenas.
“Todavía no nos hemos planteado esa situación, sabemos que el estadio de Quillota está siendo utilizado como hospital para las enfermedades no respiratorias. Tendremos que buscar donde ejercer la localía“, comentó el técnico de los canarios, Víctor Rivero, en la habitual conferencia de prensa que realiza semanalmente.
“Nos acomodaría el estadio de Calera por el tema de la superficie (sintética), es una decisión que debe tomar el club, sabemos que tampoco va a ser tan complicado si nos tenemos que trasladar por un tema que lo más probable es que en el reinicio no se juegue con público. No estoy al tanto de cual es el segundo estadio inscrito por el club, pero en lo futbolístico creo que nos acomoda el estadio de Calera por el tipo de superficie y que quizás podríamos tener más posibilidades de entrenar ahí”, detalló Rivero.
Fotografía Prensa San Luis/ Alexis Chávez.
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