Ante más de siete mil personas Coquimbo Unido, por primera vez, en el campeonato del ascenso abandonó la última posición. Mantener la categoría ya no parece una quimera.
Luego del triunfo ante Ñublense la semana pasada, Coquimbo Unido, necesitaba que sus fanáticos llegaran en masa al Francisco Sánchez Rumoroso para el duelo frente a Cobreloa.
Los dirigentes conscientes de la situación que aqueja al club, bajaron las entradas, regalaron banderas y la hinchada pirata, como ha sido la tónica durante todos los años, no defraudó, ya que desde muy temprano se hizo presente en el recinto deportivo, para apoyar al cuadro aurinegro.
Las cosas comenzaron bien para el dueño de casa, pues a los 5′ minutos de iniciarse el encuentro, el delantero Renato Tarifeño, logró abrir la cuenta con un remate bajo que dejó sin opciones al meta loíno. Sin embargo, la alegría les duró poco a los piratas, ya que dos minutos más tarde los “zorros del desierto” colocaron la igualdad a través de Richard Catrileo.
Con el empate 1 a 1 la hinchada coquimbana comenzó a alentar con más fuerzas a su equipo y en los 30′ Joe Abrigo desató la alegría con un remate que se clavó en el ángulo izquierdo de la portería de Jorge de Olivera.
Con el marcador 2-1 se fueron al descanso y en la segunda etapa Coquimbo Unido, salió a manejar a su antojo el resultado, ante un rival que no presentó mayores argumentos para buscar la victoria.
Fue así como en los 46′ el argentino, Juan Manuel Tévez, con una espectacular chilena marcó el 3-1 definitivo que le permitió por primera vez a los dirigidos de JJ Ribera, salir de la última posición de la tabla de posiciones.
Al final del encuentro el delantero Renato Tarifeño, quien fue elegido en forma unánime por los comentaristas deportivos, como el mejor jugador de la cancha, manifestó lo siguiente “creo que este era el partido para salir del fondo de la tabla , todos nos creían muertos pero estamos vivos, gracias a la hinchada que nunca nos ha abandonado, por lo que el gol y el triunfo son para ellos”.
Por su parte la visita reconoció el triunfo del local, manifestando que los piratas fueron superiorees en la cancha. “Fue un partido complicado, sabíamos que Coquimbo iba a salir con todo a ganarlo por la incómoda posición en la que se encuentran”, expresó Richard Catrileo.
Este resultado permitió que Coquimbo se ubicara en el penúltimo lugar del torneo con 21 puntos, mientras que los “huaicocheros” quedaron como colistas con 20 unidades y por ahora están descendiendo a Segunda División.
La próxima semana el equipo de JJ Ribera recibe a Curicó Unido en el Estadio Francisco Sánchez Rumoroso, recinto que espera nuevamente teñirse de amarillo y negro.
Afuera de la cancha!!
Lo que se vivió en las gradas merece nota aparte y es que estar colistas del campeonato del ascenso y llevar 7.455 personas que no paran de cantar es para enmarcarlo.
Dicen que hay equipos que lo hacen grandes sus copas, a Coquimbo Unido lo hace grande su gente y eso quedó reflejado este sábado en el Sánchez Rumoroso.
Ya en la década del 70, cuando los problemas económicos aquejaban al club porteño, y estaban destinados al fútbol amateur, fue su propia hinchada, quien en base a colectas, reunió el dinero suficiente para salvar al equipo de sus amores.
Hoy las cosas no han cambiado, la fiel hinchada continua alentando al “barbón de parche en el ojo”, por el bien de ellos esperemos que el barco pirata no se hunda y continúe navegando con esa fuerza y coraje que los ha caracterizado desde que llegaron al fútbol profesional.
Fotografía gentileza www.diarioeldia.cl
Por Alejandra Barra/ @Kandyuc