Año a año, el nivel de los arbitrajes en la Primera B, deja mucho que desear y pareciera ser que no es tema. Sin embargo, sus decisiones están marcado, en muchos casos, el desarrollo del campeonato.
Lo que aconteció en el Municipal de San Bernardo, este lunes, fue patético y requiere de un análisis profundo. Unión San Felipe tiene todo el derecho a sentirse perjudicado, cuando a Magallanes, específicamente a Miguel Ángel Orellana, le validaron un gol tres metros adelantado. Omar Oporto y su asistente no se percataron del offside.
Fue el 1 a 0 parcial, en un duelo que quedó en manos de la “Academia” por 2 a 1.
A comienzos de mes, Pablo Milad anunció un acuerdo con el fútbol brasileño para el intercambio de árbitros. “Hay que mejorar los procedimientos y hay que capacitar en el extranjero. Iniciamos una interacción con Brasil. Ya fueron a Brasil y ellos van a venir. Cuando se normalice vamos a mandar a capacitar a Brasil y los brasileños van a venir acá a arbitrar. Ese será un intercambio entre los dos países que estamos hablando. Hablamos con la comisión arbitral de Brasil, donde tuvimos una buena acogida con este aspecto de intercambiar árbitros como experiencias y aprendizaje”, contó a La Tercera.
La situación generó la molestia de los jueces chilenos. “Podemos dar la certeza jurídica que este anuncio no será posible de aplicar en ninguna de sus categorías, ya sean árbitros para el Fútbol Profesional, así como para el Fútbol Joven y también para el Fútbol Femenino”, respondieron desde el Sindicato de Árbitros Profesionales de Chile.
Ahora, con estos errores….
