Ñublense jugará el 2021 en primera división. El rojo se ganó el derecho a volver al fútbol grande de Chile luego de materializar una gran campaña: 63% de rendimiento.
No es lo único. Ostenta además, la delantera más efectiva del campeonato, con 49 goles. Le sobró torneo: aún restan dos fechas por jugar. Tuvo jugadores de altísimo rendimiento. Veamos.
Rodrigo Odriozola:
Proveniente de Rampla Juniors, el charrúa sostuvo al equipo en momentos complicados, como por ejemplo, el partido ante Unión San Felipe en Quillota. Fue figura y el rojo logró rescatar un punto que Jaime García consideró muy valioso. El equipo, incluso jugando mal lograba sumar.
“Le quiero mandar un saludo a mi esposa, hoy (ayer) fui papá por segunda vez, es difícil estar lejos. Todo el esfuerzo que hicimos durante el año de estar separado, lo culminamos con esto”, manifestó en diálogo con CDF, una vez consumado el ascenso.
Nicolás Vargas:
En Chillán recuperó su mejor versión. Se convirtió en el líder dentro de la cancha, siendo el pilar y referente del equipo. Por algo, llevó la jineta de capitán y totalizó 2180 minutos en cancha. Tiene condiciones para estar en primera si mantiene la motivación.
“Me tocó dar la vuelta larga, estuve un año sin jugar, por momentos se me pasaba por la cabeza no volver al fútbol, del Cóndor de Pichidegua, que es un club de barrio, me llamaron para que fuera a jugar, fui, me impregnaron su amor por el fútbol, gente muy apasionada, esto es en gran parte por ellos”, comentó tras el partido ante Copiapó, en diálogo con el medio ya citado.
Federico Mateos:
El motor en medioterreno. Trabajo silencioso que dio sus frutos con la inteligencia de Mateos y la visión de Jaime García, quien decidió retrasarlo en la cancha. El argentino había llegado como volante de creación pero mutó a un volante mixto. Fue el tercer goleador del equipo, con ocho tantos.
“El profe me dio mucha confianza, el equipo entero me dio mucha confianza para llegar desde atrás y poder convertir, estoy muy feliz por todo lo que se pudo lograr”, consignó Mateos.
Óscar Ortega
El “Buncho” simplemente la rompió. El distinto del equipo, cada vez que estuvo encendido marcó diferencias. La calidad ya la había demostrado en Santiago Morning y ahora solo ratificó que debía estar en un equipo que peleara por cosas grandes. Su insistencia en salir de los bohemios para ir a Chillán, quedó claramente justificada.
Fue el máximo artillero del equipo con 10 tantos.
Mathias Pinto:
No fue sencillo el año para Mathias Pinto. En Coquimbo Unido no tuvo la regularidad esperada por lo que regresó a Chillán de cara a la segunda parte de campeonato. Lo más doloroso para el goleador – anotó nueve goles solo en la segunda rueda – fue la muerte de su hermano.
“Le doy gracias primero que todo a Dios, a mi familia, no fue un año muy fácil, esto es por ellos, yo sigo por ellos, por mis hijas y por sobre todas las cosas por mi hermano, porque se me fue y obviamente, es difícil, yo quería que estuviera acá con nosotros, con mi familia y ya no está, me duele, pero sigo luchando, sé que desde arriba él me iluminó, no sé de donde saqué ese gol”, apuntó visiblemente emocionado.
Hubo otros destacados: Giovanni Campusano, Jorge Ampuero, Iván Rozas, Luis Valenzuela, en un equipo que sin duda, fue el mejor por lejos, en esta temporada y que contó además, con un estratega que ratificó todo lo que había insinuado: Jaime García.
Fotografía gentileza Comunicaciones Ñublense.
LEE TAMBIÉN:
También podría interesarte: (Videos) Así celebró el hincha de Ñublense el ascenso del rojo a primera división
Fiesta en Chillán: Ñublense se da un festín con Deportes Copiapó y es campeón de la Primera B
