Era la ocasión propicia para que Deportes Copiapó sentenciara su presencia en la Primera B, temporada 2019. Barnechea, su rival, llegaba con una carga de partidos considerable y en teoría, el calor del norte y la cancha sintética del Luis Valenzuela Hermosilla, debían pasarle la cuenta.
Esos pronósticos parecían comprobarse en los 20′ de juego, cuando el argentino Germán Estigarribia adelantaba al “León” de Atacama, colocando un resultado que aseguraba la permanencia del cuadro de Héctor Almandoz en la categoría.
Pero las cosas se torcieron. El dueño de casa fue incapaz de dar el golpe de gracia y en el fútbol se sabe que cuando no liquidas, te pasan la cuenta. Barnechea es un equipo simple, suele resolver y no perdona cuando tiene la oportunidad. Aprovechó y golpeó en los 39′ a través de su goleador, Miguel Ángel Orellana, quien marcó la paridad, confirmando su buen momento.
El segundo tiempo fue la clara muestra de un equipo que quiere pero no puede. Sin ideas, el anfitrión no tuvo grandes chances de incomodar al alemán Robert Moewes y lentamente, los minutos se fueron consumiendo, apagando esa esperanza de quedar libre de todo peligro.
Claro, porque lo que viene para Deportes Copiapó es del terror. Tiene que visitar a Ñublense que si gana, asegura su presencia en la Primera B. También debe ponerle atención a lo que haga San Marcos en Valparaíso, porque un triunfo de los “Bravos”, lo obliga a sumar en Chillán. De lo contrario perderá la categoría.
Es complejo el momento del “León”. En un comienzo y viendo los números de la anterior campaña, se pensó que incluso podría ser protagonista de la competencia, hoy tendrá que sacar sus garras para aferrarse a la división.
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