En Arica se está viviendo un drama. Tras el fallo de la Primera Sala del Tribunal de Disciplina, el club se encuentra en estos momentos descendido a Segunda División, debido a la significativa resta de puntos que se le aplicó por la mala inscripción del delantero Zederick Vega.
No obstante, no todo está perdido ya que aún debe conocerse la decisión definitiva de la Segunda Sala. Se espera ese fallo con mucha ansiedad, no solo entre los futbolistas, también entre los hinchas.
En ese escenario, el plantel intentó dar lo mejor de si en la última presentación, el sábado recién pasado, cuando empató sin goles ante Deportes Santa Cruz, en el Carlos Dittborn.
A la hora del balance, fue precisamente ese aspecto el que valoró Christian Pavez, volante de los “Bravos”: los futbolistas en cancha, se entregaron.
La situación ya escapa de las manos del plantel, aunque según adelanta el propio Pavez, se percibe que podrían ser los propios jugadores los mayores damnificados de concretarse la pérdida de la categoría.
Por ahora, no ha existido mayor acercamiento con el sindicato de futbolistas, ya que no existe una resolución final.
El mediocampista defendió además a Zederick Vega. La responsabilidad no puede recaer en el jugador, sostuvo.
Por último, Pavez realizó un balance de la campaña de los nortinos.
Días de incertidumbre se viven en la tienda ariqueña.
Fotografía Comunicaciones San Marcos.
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