Estuvo en la extensa lista de candidatos a asumir en la banca de Deportes Copiapó, un elenco al que sacó de Tercera División en el 2002 y al que también hizo ascender desde Segunda División Profesional a Primera B en 2012, pero finalmente no fue elegido.
Asegura que no se ilusionó y prefirió mantenerse escéptico ante la opción de comandar técnicamente al plantel del “León” de Atacama. Eso sí, revela que tiene una profunda convicción en que tendrá un nuevo periodo en el club y que conseguirá el ascenso a primera división.
Gerardo Silva se encuentra hoy en Rengo, desde donde contesta el llamado de Primera B Chile. La idea es conocer los sentimientos que embargan a un entrenador que ha cosechado éxitos con los atacameños. Se muestra profundamente respetuoso de la decisión de la directiva pero también aborda aspectos que a su juicio, Luis Galdames y compañía podrían haber realizado de forma distinta.
¿Cómo y donde está hoy, Gerardo?
“Me encuentro en Rengo, trabajando para la Municipalidad, en el Departamento de Educación. Estamos haciendo un trabajo remoto con la gente, con los alumnos, con los apoderados, realizando un trabajo de contención psicológica con la colaboración de algunos psicólogos y también enviando videos de trabajos lúdicos para los niños, en eso estamos hoy”.
Supimos que estuvo entre los candidatos a asumir en Deportes Copiapó ¿Quién lo llamó y cuantas veces lo llamaron?
“Me llamó el presidente, siempre tuve contacto con el presidente directamente, con don Luis Galdames, el fue el que me comunicó, pudimos conversar, me ofreció la posibilidad de poder ir a trabajar con ellos, de continuar con el proyecto que tenía Almandoz (Héctor). A mi me interesó, seguimos conversando en el transcurso de los días, pero a medida que iban pasando los días, iban apareciendo candidatos, él me lo manifestó, que iban a hablar con dos o tres, yo lo acepté aunque después me arrepentí mucho porque creo que yo no tenía porqué estar dentro de una terna, ellos me conocen muy bien, si era para evaluar, ellos me podrían haber evaluado perfectamente con los años que yo estuve allá con éxitos deportivos. Uno respeta lógicamente las decisiones de los dirigentes y los procedimientos que ellos puedan tener, aceptamos participar de la terna, conversaron conmigo en varias oportunidades”.
¿Alcanzó a ilusionarse con ser el técnico de Deportes Copiapó?
“No, yo siempre soy escéptico y soy mesurado, no me ilusiono con cosas que no son reales, entendía que era una opción nada más pero interiormente siempre tenía el deseo íntimo de ir a Copiapó. Si hay un club donde a mi me ha ido bien es justamente Copiapó, hay otros también, pero Copiapó fui en dos oportunidades, primero el 2002 y fuimos campeones y después me tocó ir el 2012 y fuimos campeones y entre eso, el 2004 estuvimos en la liguilla de ascenso, estuvimos a dos puntos de subir a primera división, entonces es un lugar que me cae muy bien, tengo una muy buena relación con la prensa, los hinchas y también con los dirigentes del club. Era una linda oportunidad, siempre he creído que yo voy a subir a primera división con Deportes Copiapó, no me preguntes por qué, es una tincada, una corazonada, porque la verdad es que quiero cerrar mi ciclo en Copiapó con un ascenso a primera división, pensé que esta iba a ser la oportunidad pero parece que se va a retrasar ese acontecimiento”.
¿Por qué cree que no lo eligieron?
“En realidad no sé lo que estará pasando por la cabeza de los dirigentes, son dirigentes nuevos. Luis Galdames es el más antiguo de todos, los demás son toda gente nueva, muchos de ellos no me conocían y la verdad es que tenían derecho a tener sus aprehensiones al respecto. Pareciera ser que la historia que tengo en Copiapó, no pesó en esta oportunidad para que yo llegara, pienso que se inclinaron por un técnico que estuviera más a caballo en lo que es la Primera B y seguramente, Emiliano Astorga, el tiene campañas consecutivas en la Primera B y consideraron que era el hombre correcto. En ese sentido no tengo ningún reparo, absolutamente ninguno, solo que creo que en alguna oportunidad yo voy a cumplir con mi tercer ciclo en Copiapó, creo que recién ahí va a terminar mi ciclo definitivo en ese club”.
¿Quedó triste, decepcionado? ¿Cómo definiría el sentimiento al enterarse que no era el elegido?
“Un poco triste sí, tengo que reconocerlo, pero decepcionado no, porque no son cuestiones que dependan de uno. La gente tiene derecho a tomar las mejores decisiones posibles y uno tiene que ser respetuoso. Yo soy respetuoso de las decisiones de los dirigentes. Cuando me tocó irme de Deportes Copiapó yo tenía un contrato por un año y medio, no les cobré ningún peso, me fui y les cobré hasta el último día que dirigí, así que ellos conocen bien mi capacidad de técnico, profesional y también mi calidad humana. Creo que no pasa por ahí, creo que pasa porque ellos consideraron que en esta oportunidad era mejor inclinarse por Emiliano Astorga, un hombre a quien yo también respeto mucho y que tiene la trayectoria necesaria para poder dirigir los destinos del club”.
¿Cree que se pueden malinterpretar estas palabras y que se le pueden cerrar las puertas en Deportes Copiapó?
“No, no se pueden malinterpretar porque estoy siendo super veraz, estoy hablando con la verdad, tengo mucho respeto por los dirigentes, mucho respeto por la hinchada, mucho respeto por la institución, por lo tanto, las puertas no pueden cerrarse de ninguna manera, todo lo contrario, creo que siempre van a estar abiertas porque en la historia que tiene el club, son dos títulos que tienen y los dos títulos los tienen conmigo, por lo tanto, sería ridículo pensar en que se me cierren las puertas. Tengo la convicción absoluta en que me queda una etapa más en Copiapó y espero que sea exitosa como las dos anteriores”.
¿Siente que ha sido poco reconocido su trabajo acá en Chile?
“Por supuesto, muy poco reconocido. He sido técnico en todas las categorías de este país, en todas las categorías tengo éxitos. Soy el único entrenador en Chile que subió de la Tercera División B a la A, de la Tercera A a la Segunda División en dos oportunidades, con Colchagua y con Copiapó, de la Primera B a la Primera División con O’Higgins y también con Copiapó de la Segunda División a la Primera B. No he sido valorado, pero son cosas que no dependen de uno, uno siempre ha trabajado de la mejor forma, creo que tengo mucha mayor experiencia de la que tenía antes como para poder hacerme cargo de un proceso serio, responsable y de corto o largo plazo porque yo soy de lucha, son un técnico de bajo perfil pero muy luchador, generalmente donde estoy, estoy consiguiendo buenos resultados. Si a eso le agregamos un vicecampeonato con Colchagua, un vicecampeonato con Copiapó, a punto de subir a primera, un subcampeonato con Puerto Montt, hay hartos logros que no han sido considerados a la hora de tomar decisiones para poder tomarme como su técnico”.
Si usted hubiese sido dirigente de Deportes Copiapó en esta pasada ¿Qué habría hecho distinto a la hora de elegir al técnico, algo que le haya molestado?
“Quiero dejar en claro que no me molestó. Entiendo como son las circunstancias, como suceden las cosas y que todas las personas tratan de hacer lo mejor posible por su institución, pero yo personalmente creo que no merezco ser considerado en una terna en Copiapó. Copiapó si me va a querer, me tiene que llamar porque yo tengo historia en ese club, eso solamente es lo que podría decir al respecto. Si yo fuera en alguna oportunidad el gerente técnico de un club, primero hago todas las reuniones internas que tengo que hacer e iríamos por el técnico que más nos interesa, si no me resulta ese técnico iremos por la segunda alternativa, esas cuestiones se manejan mucho más en secreto, no se dan a la luz pública. La verdad es que lo de Copiapó, a mi no me gustó, lo digo con el respeto y con el cariño que me merece el club, que se ventilaron casi 20 nombres para el club, me parece que eso es poco serio, pero también entiendo que el presidente le dio oportunidad también a otra gente del directorio de opinar, estaba en su derecho, me parece que ser democrático, habla bastante bien de él. Llegará el momento en que serán experiencias que les tendrán que servir para mejorar próximas contrataciones, no solamente de técnicos, también de futbolistas y personal administrativo”.
¿Va a seguir en Rengo, qué viene para su futuro?
“Tengo contrato hasta diciembre, siempre he sido bien acogido acá en mi comuna, siempre he tenido trabajo felizmente y estoy ahora esperando una posibilidad para el extranjero, Bolivia y Ecuador, son dos opciones que tengo pero si te doy nombres de equipos, estaría cometiendo el mismo error, estaría borrando con el codo lo que escribo con la mano y eso no corresponde. Lo que vale es esperar, tener paciencia”.
Lo último, ¿Deportes Copiapó tiene plantel para pelear por el ascenso a su juicio?
“A mi juicio sí, hay que reconocer y ser honesto, tampoco le vamos a meter presión al técnico que está de turno, porque es un técnico que va a tener que ir a sostener algo muy importante. Primero que todo, Almandoz, en una liguilla muy inusual, donde participaron ocho equipos, hizo una muy buena liguilla, perdió en semifinal y perfectamente podría haber llegado a jugar por el paso a la primera división. Eso marca, claro, a ese equipo se le fueron dos jugadores muy importantes, Andrade y el centrodelantero, Maxi Quinteros, son dos elementos fundamentales, eso si lo logran recomponer y reforzar, por supuesto que tiene posibilidades. El año pasado Copiapó estuvo siempre en los primeros lugares y este año, si bien es cierto no partió bien, tiene tiempo para recuperarse. Ahora, va a depender de como manejen todo lo que son los protocolos, que son importantes y de que manera recomponen la parte física, técnica y táctica del equipo para poder competir con reales opciones”.
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