Por @Pablo_sepúlveda
Se vislumbraba un consejo de presidentes que dejaría mucho para el análisis, lo que finalmente terminó aconteciendo prácticamente al pie de la letra. Desde temprano -antes del mediodía – los 31 representantes de los clubes del fútbol chileno se reunieron en la ANFP para sentar las bases de lo que sería la competencia en el segundo semestre y a partir del año 2018.
La ANFP, encabezada por su presidente Arturo Salah, buscaba ratificar acuerdos previamente establecidos, entre ellos la rebaja a cuatro de los extranjeros en cancha, la mantención de un cuarto de cupo de ascenso para los equipos de la B y un descenso desde esta categoría a segunda división a fines de 2017. Este punto sería particularmente duro y terminaría por generar un quiebre que puede tener insospechadas consecuencias. También estaba en tabla el eventual regreso a los torneos largos a partir de 2018.
El consejo comenzó a sesionar alrededor del mediodía. Y como se esperaba, el primer punto que no tuvo fácil resolución fue el tema de los extranjeros. Finalmente se mantendrán los cinco en cancha este segundo semestre y se analizará su reducción a cuatro a contar de enero del próximo año.
Ya durante la tarde se abordó el otro tema que podía caldear los ánimos. La fórmula de ascenso para el llamado torneo de transición de la Primera B en 2017 y el descenso a fin de este año en esa misma categoría. Aquí no hubo espacio para el consenso, por el contrario, las diferencias llevaron a un final inesperado.
Pasadas las ocho de la noche, los representantes de los equipos de la B abandonaron la sala y conversaron por espacio de 20 minutos cerca de la zona de estacionamientos de la casa del fútbol. El primero en abandonar, raudamente, fue Miguel Nasur, presidente de Santiago Morning. Escueto indicó estar “muy disconformes, no es la actitud de un directorio”, Lo siguieron los representantes de Deportes Copiapó – su presidente Felipe Muñoz – y el gerente general de Rangers, Martín Iribarne, entre otros. No hubo comentarios a la prensa. El quiebre era evidente.
Ya con los representantes de la B fuera de Quilín, fue Aníbal Mosa, presidente de Colo Colo quien comentó la cita. El timonel albo destacó la mantención de los cinco extranjeros en cancha y también abordó la repentina partida de sus colegas del ascenso.
“Aprobamos las bases del transición 2017 (en primera), el nuevo torneo del 2018 que va a ser largo de 30 fechas, va a partir la última semana de enero y terminar en diciembre con una para en junio o julio. También logramos mantener en cinco los extranjeros para este campeonato. Lo vamos a volver a discutir una vez salgan las bases del 2018, hoy no las vimos, vamos a insistir que se mantengan los cinco extranjeros en la planilla y en cancha”, aseguró, dejando claro que a Colo Colo no le agrada la disminución proyectada de los foráneos.
“Hubo una molestia de los consejeros de la B por el tema de los descensos, no se llegó a acuerdo, de repente nos dimos cuenta que se habían levantado y se habían ido. Tenía que ver con los ascensos entre Primera B y Segunda. Los entiendo en cierta manera, esperemos que pueda haber una mesa de trabajo, se lo sugerimos al directorio y al presidente”, agregó.
Posteriormente, y tras una breve espera sería el propio Salah el que abordaría el conflicto. “Quedamos un poco inquietos porque hubo algunos puntos en que no hubo acuerdo, sobretodo con la gente de la Primera B, fueron puntos de las bases en los que no podíamos aceptar no honrar los acuerdos que ya están tomados. Cuando eso se quiere evitar, este directorio y yo personalmente no estamos de acuerdo”, afirmó.
Luego comentaría, específicamente, los motivos que llevaron a los consejeros del ascenso a abandonar anticipadamente el consejo. “Querían revisar los acuerdos que están tomados y que están en las bases del torneo respecto a los ascensos y descensos, acuérdense que tuvimos un paro de futbolistas, en ese momento se llegó a un acuerdo que nosotros estamos honrando y que respaldó el consejo”.
Con todo este panorama, si bien no quiso hablar derechamente de renuncia, si reconoció que deberá analizar lo sucedido. “No me pida definiciones ahora, no es inteligente hacerlo. Yo y mi directorio estamos en un periodo de reflexión y de estudiar cuales son los pasos a seguir. No es respetuoso, ellos decidieron no participar y eso no me parece, salimos con un sentimiento de tristeza, no es la manera de trabajar”.
Por último, Salah no dejó pasar la ocasión para destacar los acuerdos alcanzados. “Fue un consejo largo, intenso, hubo mucho análisis, aprobamos muchas cosas, todas las bases del torneo de Primera A, la gran mayoría de la B, se aprobó el campeonato largo, los extranjeros. Cuando hubo que llegar a los puntos en que había que ver otros temas no estuvo disponible la Primera B. Me sentí mal porque no debe ser que se pare un grupo de presidentes de clubes en forma inesperada y salgan de la sala sin haber alguna razón que hayamos provocado para aquello”.
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