Al parecer, hay dirigentes que viven en un mundo paralelo y que todavía no se dan cuenta del alcance histórico que tiene este momento en Chile. Si no, no se entiende que hayan pretendido que el fútbol volviese a disputarse como si nada estuviese aconteciendo en el país.
Lo cierto es que Chile vive el estallido social más importante de los últimos 30 años y quizás de su vida como nación independiente. En las calles, la gente se manifiesta por un país mejor, contra una clase política y empresarial que ha saqueado durante décadas.
En ese contexto, la suspensión del partido que la ANFP programó porfiadamente para el mediodía de hoy, entre Magallanes y Cobreloa, no debe sorprender. Recordemos, hay paro nacional este martes.
Los jugadores de Cobreloa lo habían adelantado en la semana: no estaban las condiciones para jugar. El tiempo les dio la razón. Por lo mismo, estaban en su derecho de exponer sus críticas hacia quienes tomaron la decisión de mandarlos a la cancha. Así lo hicieron a través de redes sociales.
En tanto, según consigna En La Línea, el técnico Víctor Rivero expresó que “esto es una chacota. Hemos venido dos veces a jugar y nos hacen desvestirnos”.
Por último, Guillermo Firpo señaló que “la alcaldesa suspendió el partido. Estamos con el pueblo chileno”.
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