Jaime García tiene una misión clara: ascender con Ñublense, para de este modo, olvidar varios años de malas campañas, con el rojo peleando incluso por no descender.
La temporada pasada, eso sí, finalizó con buenas sensaciones y con el equipo jugando la liguilla de ascenso. No le alcanzó pero la ilusión para este 2020 se renovó.
En esta ocasión, García tuvo la posibilidad de armar él, el plantel. Confió en un viejo conocido: Mario Briceño, delantero de reconocidas condiciones pero también con un historial de indisciplinas.
De hecho, la semana pasada hizo noticia por ser detenido en hora de toque de queda. Según contó a Primera B Chile, estaba fuera de casa buscando una farmacia para comprar remedios para su hija.
En diálogo con nuestro medio, el técnico de los rojos, analizó la situación que enfrenta el futbolista. ¿Estará ante su última posibilidad de despegar definitivamente?
“No soy quien para juzgarlo, para la gente, Mario es un cabro de mierda, muchas cosas pero para entorno que tiene Mario, es difícil a lo mejor llegar a hacer un comentario de él”, reflexionó García.
“No me voy a cansar de ayudarlo, siento que nosotros como técnicos tenemos una responsabilidad humana y al servicio de la comunidad y a veces eso tampoco lo entendemos como técnico, nos cuesta tanto ayudar al de al lado, si nos podemos cagar, nos cagamos. Tu quieres los mejores y a veces los mejores son los que tienen problemas“, indicó García.
Agregó que “Mario es un chico super divertido, un buen tipo,creo que le falta madurar, a los 17 años todavía estaba en el semáforo, entonces, criticarlo es super fácil, para el medio que no lo conoce, el entorno familiar es super duro el de él. Echarlo sería super fácil…esto es lo que me gusta a mi, lo difícil, mientras lo dirija, voy a estar ayudándolo“.
Por último, apuntó que entiende que en el medio futbolístico surjan críticas hacia Briceño.
“La sociedad no tiene porqué entender, con justa razón hay críticas y son justas, se manda puras cagás y se manda puras cagas, pero siento que son eso, no tienes quien te diga para donde vas, algo fuerte detrás de él, le ha faltado su fuerte”, expresó.
“La gente si tiene un comentario ácido de él, es con todo fundamento porque estás ante un deporte. Tiene que entender que esto se le va acabar en algún momento y la patá en el orto va a ser fuerte, él no sabe lo que tiene, sé lo que Mario ha pasado, lo tengo absolutamente claro, puede ser que a no todos les gusta lo que estoy diciendo, esto no es el Hogar de Cristo, los entiendo y les encuentro la razón pero yo soy porfiado, quiero darle la mano, pero él también sabe que esa ayuda la mecha se le va a acortando y cuando se le corte la mecha, no sé si va a tener un segundo Jaime García”.
Puedes revisar la entrevista completa aquí.
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