Un importante triunfo en condición de local consiguió Ñublense. El cuadro de Chillán se impuso por 2 a 0 a Cobreloa, dejando al elenco loíno atrapado en la última posición de la tabla, con apenas dos unidades.
El duelo eso sí, no fue fácil para los “Diablos Rojos. En el primer tiempo y con la necesidad de los tres puntos, fue la visita la que se vio mejor en el terreno de juego del Nelson Oyarzún Arenas.
Sin embargo, los dirigidos de Pablo Abraham lograron resistir los embates naranjas y con orden defensivo mantuvieron su arco en cero, lo que sería clave para el posterior desenlace del encuentro.
En la segund mitad llegarían los goles. En los 56′, Luis Flores Abarca protagonizó una gran maniobra personal, cedió para Eduardo Vilches, quien de manera precisa, centró para la aparición de Lucas Triviño, quien superó la resistencia de Ezequiel Cacace.
El gol fue una estocada muy dolorosa para Cobreloa. Como ha sido la tónica en este comienzo de torneo, los naranjas tienen posesión y toque de balón pero carecen de real peso en ofensiva, lo que finalmente termina por pasarles la cuenta.
En los 66′, el dueño de casa repetiría la fórmula, ahora con Jesús Silva como protagonista, habilitando otra vez a Triviño, a la postre la figura de la cancha como autor de los dos goles de la jornada.
Los minutos finales vieron a un anfitrión dejando correr el tiempo sin arriesgar demasiado ante un cuadro loíno que no tuvo argumentos para intentar la recuperación.
De este modo, Ñublense suma ocho puntos y se posiciona en la zona de avanzada de la tabla, aunque aún debe mostrar mayor regularidad para intentar pelear por el único cupo a primera.
Lo de Cobreloa en tanto, es para el olvido. El cambio de técnico no surtió el efecto esperado y aunque por plantel parecía que lograrían pelear arriba, lo cierto es que apenas suma dos puntos y es colista de la tabla. El sueño del ascenso comienza a diluirse rápidamente de no mediar un cambio radical en su rendimiento.
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