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Óscar Salinas disfruta un presente feliz en Deportes Recoleta. El delantero es una de las piezas fijas en el once titular del “Reco”, sorpresivo puntero del torneo, con 15 unidades, consecuencia de cinco triunfos y tan solo una derrota en estas seis primeras fechas del campeonato. Una dulce actualidad que contrasta con los difíciles días que vivió en la segunda parte del 2023, cuando defendía los colores de Deportes Temuco.
Salinas, quien llegó a comienzos de ese año al “pije” para colocarse bajo las órdenes de Juan José Ribera, perdió protagonismo con el arribo de Román Cuello a la dirección técnica del albiverde. En diálogo con “Estamos en la B”, programa de PrimeraBChile que se emite los martes a las 20:00 horas, el delantero campeón de la Primera B con Deportes Melipilla el 2006 y campeón de Tercera División con Unión Temuco el 2009, relató la profunda decepción que le provocó la forma en que se manejó Cuello en el periodo en que compartieron en el albiverde.
Óscar Salinas relata su decepción con el DT de Deportes Temuco
A la hora de hablar de la relación con el entrenador uruguayo, Salinas no esconde sus sentimientos. “No, no me fui picado, la verdad que no, me fui triste, me fui triste de la persona que está ahí dirigiendo (Román Cuello). Me fui muy triste y muy desilusionado de su persona y quiero aclarar algo, que los goles son para Germán Estigarribia que también es narigón“, comentó, haciendo alusión además, a una publicación que dio para especular con que sus festejos este año, tenían también relación con el DT de Deportes Temuco.
En ese sentido, amplió comentando que “me llamó un profe que está en la juvenil, diciéndome que si yo tenía rabia o rencor con el técnico, hasta el día de hoy no tengo rencor con nadie. Me fui triste, me fui muy triste, cansado, muy cansado, luché todo el año para ser aporte, siempre tiramos para adelante todo lo que era el camarín, el grupo, estábamos rodeados de compañeros que querían subir y después como se dio el irse, el no jugar la última fecha, todo el año, me sentí basureado“.
Relató además que siempre trabajó con la misma dedicación. “Gracias a Dios nunca reaccioné mal, nunca dije nada, siempre me preocupé de trabajar, yo creo que también fue gracias al apoyo de mi esposa y de mis hijos y de los vecinos que tenía en ese entonces, de mi amigo Cristian, el Cako, también Patricio Lira, la familia del Pato, que me ayudaban a ver desde otro punto de vista las cosas, pero en cuanto al técnico me fui triste, desilusionado, muy desilusionado”.
Ante la pregunta específica, profundizó las razones de su decepción con Cuello, quien sigue dirigiendo a Deportes Temuco. “Yo terminé jugando con el “Coto” (Ribera), cuando llega (Román Cuello), yo lo saludo, le presento el club y después de la nada, desaparezco de todo y yo en todas las instituciones en que he estado, nunca, pero nunca, he remado para atrás, nunca he dicho nada y de ahí dije yo, tengo que irme, llegó él y dije tengo que irme, habían opciones de irme a otros clubes del ascenso y tenía las opciones de irme y no me fui por dos razones, porque él me pone tres, cuatro minutos con Puerto Montt, que perdimos y la segunda razón es porque mi esposa me dijo, por qué te vas a ir, si nunca has renunciado a ningún proceso y esta no va a ser la excepción y a los niños tampoco los vamos a sacar de acá porque estaban felices”.
Con ese panorama, decidió permanecer el segundo semestre en el club. “Me hice la coraza, me entrenaba como siempre y no me fui, seguí luchando, conversé con él, muchas veces, si él quería poner a otro jugador que lo pusiera, si no me quería llevar que no me llevara, que estaba en su decisión porque el mandaba, que yo no era amigo de él, que yo era un jugador más y que iba a respetar su decisión”.
Siente que al estratega le faltó franqueza para abordar, directamente, las razones de su escasa participación. “Yo creo que cuando uno va a ser técnico, el día de mañana, espero tener la fortaleza y la valentía de decirte, mira yo por esto no te pongo y no vas a tener opción acá. No sentí la recepción de él, no lo sentí directo, habíamos sido compañeros de fútbol, en Deportes Melipilla, yo era chico, pero fue eso, más que rabia, más que rencor, no lo tengo, aprendí de eso cuando mi papá murió, no tener rencor por las personas, pero yo creo que uno se entrega por el que está adelante al 100, sin importar si juegas o no, quiero que tengan claro eso, entonces, tú lo que esperas recibir es lealtad y que sean directos, te falta esto, te falta esto otro y no lo fue así conmigo y con varios, eso fue”.
Relató además, que él y varios compañeros pensaron no presentarse cuando llegó la hora de la última conversación. Sus valores, dice, le indicaron que debía actuar de otra manera y llegar a la cita final. “Cuando llega él, yo ya había decidido irme, si llegaba a fin de año, yo me iba a ir sí o sí, pero siempre fui persona, mira a lo que quiero llegar, después, él nos junta a todos a conversar y yo me iba a ir, muchos se querían ir, muchos no querían conversar con él, mis padres me enseñaron valores, ser educado, fui, me presenté, lo escuché, no te voy a decir la conversación porque no va al caso, yo le digo bueno, que te vaya bien, éxito y nada que decir, estoy acá porque tengo valores, “no quería estar”, le dije”.
¿Faltó manejo del DT para haber alcanzado el ascenso el 2023? Salinas prefiere dar el episodio por finalizado. “Es como echarle más leña al fuego, yo ya no quiero hablar más del señor y solamente quiero lo mejor para ese hermoso equipo, tú no te imaginas lo que vibraban mis hijos cuando iban al estadio o cuando papá hacía un gol o cuando un compañero hacía un gol, entonces, a esa persona no le importó nada lo que había atrás, entonces, le deseo lo mejor al equipo, espero mejore, espero levante, tengo compañeros ahí, tengo amigos que quieren lo mejor para la institución, es un lindo equipo y solamente quiero lo mejor para ellos. Acá cierro el tema con este señor porque no me interesa darle más palco y para Temuquito lo mejor siempre, siempre, fui muy feliz cuando salí campeón y fui muy feliz ahora cuando peleé liguilla”.
Hoy Salinas es figura en el puntero de Primera B, Deportes Recoleta.
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Fotografía Benjamín Aguayo/primerabchile.cl.
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