Por @Pablo_sepúlveda
Lo que mostraron Rangers y Curicó Unido zanjó toda discusión. Se jugó como clásico y se vivió como clásico. Aunque la estadística sigue siendo ampliamente favorable para el rojinegro en duelos oficiales, lo que pusieron en cancha piducanos y curicanos estuvo a la altura de las casi 8 mil personas que repletaron el estadio Fiscal de Talca.
Fue el dueño de casa el que manejó las acciones en el primer tiempo. De arranque, el equipo de Héctor Almandoz trató de imponer sus términos. Y se las arregló para inquietar el arco de Jorge Deschamps, quien respondió cuando fue requerido, luego de una jugada preparada y remate de Cristian Muñoz. El local presionaba tratando de poner término a la mala racha que ostenta en los últimos choques con los “torteros”, ya que solo celebró en una ocasión en los últimos ocho partidos.
Rangers seguía siendo más, presionaba y se generaba ocasiones, especialmente a través de balones detenidos. También tuvo una clara en los pies de Santiago Malano, pero el “Santi” anda peleado con las redes y finiquitó de mala manera.
Con el correr de los minutos, la visita comenzó a salir tibiamente, aunque no encontraba la generación de juego. Ábalos, quien no estaba en su plenitud física, se veía superado por la marca de Marcelo Jorquera y Jonathan Mazzola. De todas formas, Curicó se las arregló para inquietar a Cacace a través de Camilo Ponce, quien no pudo finiquitar de buena forma, pese a quedar de frente a la portería.
En el segundo tiempo, Luis Marcoleta dispuso el ingreso de Franco Bechthold por el disminuido Ábalos y logró equilibrar en algo en medioterreno. La expulsión de Cristian Muñoz en los 60′, hizo pensar que Curicó Unido se iría con todo en busca del triunfo para acortar a cinco las unidades que lo separan del líder, Deportes Temuco, que a esa altura ya había sido derrotado por Deportes Concepción en el Ester Roa Rebolledo.
Pero Almandoz retrocedió sus líneas y no le dejó espacios a la siempre peligrosa ofensiva albirroja, que no pudo dañar mayormente a la zaga talquina, comandada impecablemente por Bruno Romo y Francisco Tapia, además del aplicado trabajo de Celasco y Ormazábal por las bandas.
El resultado seguía siendo incierto, sobretodo cuando Camilo Ponce se ganó la expulsión por cartulina roja directa, por una supuesta agresión a Mariano Celasco. En igualdad numérica el duelo ganó en emoción y se volvió aún más intenso.
La más clara del partido llegaría sobre el final. Mariano Celasco, el mejor de la cancha en Rangers peleó un balón en medioterreno, habilitó a Orellana quien cedió para Malano. Totalmente destapado el argentino gatilló, pero el tubo devolvió cuando Jorge Deschamps ya estaba vencido. En el rebote, el balón dio en el brazo del golero visitante y se fue al tiro de esquina. Pudo ser la victoria del rojinegro, cuando el reloj indicaba 89′ de juego.
Así, Rangers y Curicó Unido repartieron puntos en un compromiso que se jugó como clásico y que mostró a dos equipos que pueden ser perfectamente protagonistas de la postemporada. Eso sí, el sabor amargo para los albirrojos de desaprovechar la opción de quedar a cinco puntos de Deportes Temuco restando 12 en juego. En tanto, Rangers, pese a jugar bien, lamenta estar ahora, fuera de la postemporada por diferencia de gol.
En la próxima jornada, los pupilos de Almandoz deberán visitar a Deportes Concepción en un compromiso que será una verdadera final. Curicó Unido en tanto, recibirá a Unión San Felipe, buscando seguir a la caza de Deportes Temuco y tratando de asegurar de paso, su presencia en la liguilla final.
Fotografía Eduardo Raasch
