Delicada, por decirlo menos, es la situación que atraviesa Coquimbo Unido. Los piratas han jugado ocho partidos – tienen un duelo pendiente frente a Everton – y aún no saben de victorias en el campeonato, por lo que marchan colistas del torneo, con apenas cuatro unidades.
En la última jornada, los aurinegros se inclinaron ante Deportes Copiapó por la cuenta mínima, caída que agudizó el mal momento, ya que por quinta fecha consecutiva, los filibusteros no llegaron al gol.
“El responsable soy yo. Lo tengo claro, yo soy el que determina, el que manda. Si hay cosas que no hablé hace un tiempo, no las voy a hablar ahora, tengo moral y la espalda para soportar muchas cosas”, señaló el estratega Víctor Hugo Castañeda, una vez consumada la caída frente a los atacameños.
“Estamos en una espiral negativa, la pelota no entra. El tiro del “Chucky iba a dentro y se desvía, el penal, una serie de ocasiones que no concretamos, dar más explicaciones es redundar en lo mismo”, agregó el entrenador, consultado por la evidente incapacidad goleadora de su equipo.
Tan crítica es la situación, que incluso en el puerto se ha especulado con la salida del ex volante de Universidad de Chile. “Tomé al equipo para salvarlo del descenso y lo salvamos. Este año la campaña ha sido mala, estamos en un periodo de transición. Aquí hay tema de frustraciones pasadas, la misma gente que insulta, que putea, en el primer tiempo aplaudía”.
“Tengo mucha fuerza pero hay una serie de situaciones que debemos conversar. He hablado con los jugadores y siempre me han respaldado, teníamos la opción de ganar y no se dio, ni de penal hacemos un gol. No hablaré nada que no sea del partido”, aclaró.
Respecto a las difíciles fechas que deberá afrontar Coquimbo Unido, considerando que deberá medirse con Temuco, Ñublense y Cobreloa, el entrenador prefiere ser cauto. “El horno no está para bollos. El impacto de perder es muy fuerte, ponerse a opinar de lo que viene no, porque se pueden decir cosas que uno no quiere”, señala.
En el plantel en tanto, también realizaron su autocrítica. “Hemos entrenado de muy buena forma, no tengo palabras para el momento, estamos tristes, amargados, ni en el peor escenario nos imaginamos esto, los jugadores somos los culpables, no queda más que trabajar”, reconoció el arquero Jaime Bravo.
“Sé del esfuerzo que hace la gente por pagar su entrada, tenemos que hacer nuestra autocrítica, sé que saldremos adelante, somos grandes. La única forma es trabajar como lo hemos hecho”, añadió.
El próximo rival de Coquimbo Unido será el líder Deportes Temuco, el próximo domingo en el Germán Becker a contar de las 15:30 horas.
