8 de septiembre del 2018. Había viajado al puerto pirata para presenciar el choque entre los dos más serios aspirantes al ascenso, Coquimbo Unido y Cobresal. A la postre, ambos subirían; el pirata como campeón, los mineros ganando la liguilla en una infartante definición ante Cobreloa.
Caminaba rumbo al Francisco Sánchez Rumoroso, luego de un tremendo almuerzo, un mariscal. La empinada ruta me tenía transpirando, la mochila estaba pesada; computador, cámara fotográfica, ropa, grabadora, además del largo viaje. A la distancia divisé a integrantes de al “Hueso Pirata” y desde la distancia los fotografié.
Continué ascendiendo y me encontré de frente con un hincha aurinegro ¡Wena Primera B! me dijo. ¡Wena!, respondí para luego escuchar: “venga conmigo, vamos donde están los demás! “No amigo, vengo cansado y quiero llegar al estadio”.
Insistió e insistió y no me quedó otra que acompañarlo. Bajé pensando en que tendría que rehacer el camino andado… Cuando llegué, ¡sorpresa!, los cabros estaban meta fritanga: sándwich de pescado, me ofrecieron y dije que no, que había almorzado recién y no podía más. El mariscal, en serio, había estado tremendo.
“Sin fritanga no hay partido“, me dijo alguien, mientras yo tomaba fotos del grupo compartiendo. Entendí que era claro que debía probarla. Puta que estaba bueno, de hecho quedé con ganas de comer más y eso que el almuerzo había estado abundante.
Conversamos un rato más, pura buena onda y luego retomé mi camino. Me sentí un afortunado, había compartido una tradición de la barra aurinegra, conocí el cuento desde adentro…Por lo mismo, reviví esa tradición esta semana, en entrevista con Kilian Delgado, una de las figuras de ese Coquimbo Unido campeón.
“Los compañeros que llevaban más tiempo en Coquimbo y los formados en casa en vez de hacer un asado de plantel, hacían fritanga, para que la gente sepa un poco, la fritanga es un sándwich de pescado, pan de marraqueta con ensalada a la chilena y pescado frito. La verdad que era algo novedoso, nunca me imaginé comer, uno lo ve como pan con pescado, después como familia también hacíamos, con compañeros también compartíamos fritangas, era muy delicioso, en sí Coquimbo tiene muchas variedades de gastronomía“, recordó “Killer”.
De hecho, no ha perdido esa costumbre alimenticia, pese a que en su tierra natal, siendo también una ciudad costera, se desconoce este plato. “Tenemos en Valdivia el muelle donde venden pescado, la Feria Costumbrista en Niebla, la verdad que no (no se prepara), es algo de la zona de la Cuarta Región, sobre todo, Coquimbo, me gustó mucho“.
La fritanga, un sándwich tradicional del puerto pirata.
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