Por @Pablo_sepúlveda
Es el equipo a vencer, el rival que todos buscarán bajar. El que lo haga primero, terminará con una racha de hasta ahora, 14 fechas invicto. Nadie lo pudo derribar y por eso manda en la tabla.
No son solo números. No se trata solo de la delantera más efectiva o la segunda defensa menos batida. Es el conjunto, las piezas que conforman el rompecabezas, que aceitan el engranaje de una máquina que se acostumbró a ganar y que quiere rematar su prodigiosa obra con el ascenso, el premio mayor para todos los que compiten en esta categoría.
Así terminó Curicó Unido la primera parte de la competencia. A todo vapor. Rescató 28 de los últimos 30 puntos o lo que es lo mismo, nueve triunfos y un solo empate. De no mediar un cataclisma o una gesta heroica de San Marcos se irá a primera división. ¿Pero, en que pie llega el líder a esta segunda rueda?
Ya dio una pequeña muestra de su poderío aplastando a Rangers el viernes pasado en San Fernando, en un cuadrangular en el que sostuvo su invicto aunque dejó escapar la copa al perder en lanzamientos penales frente al local Colchagua. ¿Qué piensa su técnico, el avezado Luis Marcoleta?
“Esperamos llegar en el mejor nivel, así como terminamos, ojalá mejor. He visto bien a los muchachos, es de esperar que ratifiquemos todo lo bueno que hemos venido haciendo para seguir tras nuestro objetivo. Hay que hacerlo con tranquilidad y mucha serenidad, respetando a los rivales, jugando con concentración y teniendo una competencia con el compañero, no contra el compañero, eso ha sido muy bueno para el equipo”.
Claro, es que variantes tiene. Basta mirar el plantel. En el arco, dos experimentados como Jorge Deschamps y Luis Santelices, en defensa el paraguayo Rodrigo Riquelme, el mismo Francisco Silva que puede jugar también en la contención o Erick Godoy por nombrar algunos. Sigamos, un mediocampo de exquisito corte, Caroca con su habitual empuje, Cortés, Arguinarena y principalmente Ábalos para el desequilibrio. Arriba goles, muchos goles. Elizondo, Monreal, Medina, Olivera, Hormazábal, bonita pugna.
“Eso habla del trabajo de ellos mismos, uno es el que propone, el líder que planifica con una metodología de persuasión, ellos se entregan al trabajo. Todos los que integran el plantel están en muy buen nivel, es de esperar que esa competencia se mantenga porque el hecho de ser competitivo, eleva los rendimientos individuales”.
Además quieren revancha por lo acontecido la temporada anterior. Se palpa el hambre de triunfo y gloria. Terminaron abrazados en un círculo el partido ante Rangers mientras los piducanos, disgregados, sin respuestas, caminaban cabizbajos a camarines. Curicó en cambio, quiere ganarlo todo.
“Siempre es bueno ganar, no hay mejor remedio que ganar, tener buenos jugadores y ganas de ganar, esas dos condiciones las tiene Curicó, hay que sacarle provecho. Hemos realizado un trabajo de un año y medio, en la primera rueda tuvimos un 53 por ciento de rendimiento, finalizamos con un 73 y ahora en la tercera patita, llevamos un 82 por ciento, eso habla del buen trabajo, tener paciencia y respetar los procesos”.
Por último, cuentan con otra ventaja. Marcoleta conoce a su gran rival como la palma de su mano. Seguramente la disputa será con San Marcos, que además cambio de técnico. “Más que los técnicos, creo que la situación de Arica es la complicada porque hay muchos problemas de logística e infraestructura que va mermando el trabajo de cualquier técnico. Espero que lo solucionen, ojalá sigan en la misma línea, se potencien y hagamos un bonito campeonato”.
Imagen de archivo
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