Se jugaban los descuentos del duelo entre Ñublense y Santiago Morning. El cuadro de Chillán se imponía por la cuenta mínima ante los bohemios, pero apareció David Escalante para anotar la igualdad y evitar la cuarta caída en línea de los metropolitanos.
Su celebración tendría de dulce y de agraz. Con el típico gesto para indicar que habían puesto huevos, Escalante mostró su satisfacción por el tanto que les permitió rescatar un punto desde el Nelson Oyarzún Arenas. Sin embargo, el árbitro Nicolás Muñoz decidió expulsarlo.
“Malinterpretó las cosas, el festejo nunca fue para la hinchada, era para el profe que estaba en la tribuna, que nos dijo que con huevos lo podíamos ganar. Nunca fue para la gente, interpretó el árbitro que provoqué pero ya era tarde”, comentó el goleador a www.futbolprimerabchile.cl
“Lamentablemente ya pasó, mañana iré a apelar y a ver que pasa. Se dio cuenta que no era para la hinchada, le explicamos la situación, el reglamento dice que cuando hay provocación a la hinchada tiene que haber expulsión”, agregó.
Aunque dice que el árbitro reconoció que no había existido tal provocación, Escalante no sabe si será sancionado o no. “Dios quiera que no, hay que ver que dicen los jueces, vamos a ver que dicen”.
Al margen de la expulsión, “Chiquito” fue clave para evitar la cuarta derrota en línea de Santiago Morning. “Un punto que nos puede llegar a servir, más que nada por lo que se hizo en el primer tiempo merecíamos irnos dos o tres a cero. Tuvieron una sola situación, un córner que fue el gol de López. En el segundo tiempo jugamos desordenados, lo importante cuando vienes perdiendo es sumar, por lo menos pudimos empatar”.
La baja de rendimiento de los bohemios ha coincidido con la ausencia del “Clavito” quien aún debe cumplir una fecha de castigo. “Siempre es bueno que tu líder esté dentro, que de instrucciones, hablarte, decir como tienes que moverte pero a veces pasan estas cosas, hay que afrontar como sea, falta poco para que vuelva”.
A quien si le queda un largo periodo es al propio Escalante quien tiene contrato por un año más con los microbuseros. “La idea siempre es ir a un equipo grande, competitivo, pero vamos a ver que dice Dios en el futuro, mi realidad es que estoy en Santiago Morning, si me quieren poner jugaré, si quieren, no jugaré, trabajaré para dar lo mejor de mi, hay que disfrutar donde uno está, trabajo para ir a un equipo grande y no volver más a un equipo chico”.
Por eso, más que mirar nuevos desafíos, prefiere concentrarse en Unión San Felipe, el próximo rival del “Chago”. “Esperemos que podamos dejar los tres puntos en casa, ellos juegan muy bien. No hay rivales chicos en ninguna parte del mundo, salvo los equipos grandes que hacen diferencia en todos lados como Real Madrid o Barcelona, los demás somos todos mediocres, cualquiera le puede ganar a cualquiera”.
“El primer semestre salían todas las cosas, cuando estás en racha, ganas seis o siete partidos. Lo difícil es mantenerse, si no lo sabes llevar cuesta muchísimo, no fuimos un equipo estable”, cerró el goleador trasandino.
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