Por @Pablo_sepúlveda
Trabajo en equipo, unidad, compromiso, responsabilidad, amor y sacrificio por el club. Esos son los conceptos que se escuchan con fuerza en Concepción, específicamente entre el grupo de trabajo, que liderado por Víctor Tornería, logró recuperar el control del Club Deportivo y Social Deportes Concepción, luego que el 26 de abril pasado y debido a una nefasta administración de la Sociedad Anónima Fuerza, Garra y Corazón, la ANFP determinara la desafiliación del club, enviando a la institución al fútbol amateur y dejándola prácticamente en la indefensión.
La Ley de Sociedades Anónimas llegó con la promesa de dirigentes responsables, fiscalizaciones adecuadas y un discurso que al oído sonaba casi idílico. Sin embargo, la fuerza de los hechos se impuso. La legislación no fue capaz de evitar los malos manejos. Es más se hizo patente una falta de claridad sobre quienes deben ejecutar la tarea de realizar los controles que eviten los malos manejos, especialmente en el ámbito financiero.
Aunque las promesas fueron, en el caso lila evidentemente nada más que palabras y el club pareció en el desamparo, un grupo de jóvenes dirigentes quiere escribir otra historia y por eso, decidieron evitar el inmovilismo que podría haber generado el shock que supone un castigo de tal naturaleza, se pusieron manos a la obra y ya conforman un grupo que crece día a día tratando de lavar la cara de la institución. Aclaremos, no se trata de propaganda hacia los nuevos dirigentes; el fondo es otro, hay un trabajo colectivo que llama la atención y que no necesitaría de prensa porque prácticamente habla por sí solo, aunque la palabra escrita si para algo sirve es para dejar un registro.
“Hoy somos más de 40 personas, arquitectos, abogados, asesores financieros, cesantes, dueños de casa, hasta empresarios, todos trabajando gratis por el club de forma coordinada”, comienza su relato Tornería, hoy presidente del Club Social.
La labor de la nueva directiva comenzó a materializarse antes de conocer la resolución de la ANFP. En primer lugar llamaron a elecciones, las que se realizaron finalmente el 19 de mayo, tres semanas después de la decisión del consejo de presidentes. De ahí en más, han logrado allanar un camino que no ha sido sencillo.
“En principio analizamos llamar a ex jugadores y dirigentes porque pensábamos que no la podíamos, ninguno tenía experiencia ni siquiera en equipos de barrio, solo las ganas y la transparencia. Todos confiamos en todos, además contábamos con un respaldo grande dentro del club, “Hualpén Lila”, “Unidos por el Conce”, Familia Lila” y “Barra Los Lilas”, que nos da toda la base”, detalla el timonel penquista.
Tan llamativo ha sido el proceso que incluso las miradas de uno de los archirrivales han apuntado hacia la nueva administración. “Nos pasa con (Fernández) Vial, me llamaron el viernes pasado, nos juntaremos esta semana, para que ellos nos llamen es porque algo bueno estaremos haciendo. Hay una imagen mala, cuando me entrevistan me preguntan si es verdad que soy barrista, si lo soy, no sé si cuando empecemos a jugar estaré en la barra porque hay que hacer cosas, hasta te pierdes los partidos. A la gente le cuesta entender que aparte de estar estudiando un MBA, seas barrista y estés a cargo del club. Hablo por todo mi directorio”.
La situación en la que recibieron el club, siempre en palabras de Tornería, era penosa. “Ganamos un viernes, el lunes nos llegó la cuenta de luz y de agua que nos dejó la concesionaria, casi un millón y medio de pesos. La plata que teníamos de las cuotas sociales se gastó en eso, contactamos gente, nos dimos cuenta que entre nueve no daba, después éramos cincuenta, sesenta, priorizamos. Si nos demorábamos un mes más nos remataban los campos deportivos, los abogados se pusieron de cabeza en el tema”.
Tantas han sido las ganas de participar de distintos sectores de la sociedad penquista que incluso el club ahora cuenta con un equipo comunicacional que se ha dado a la tarea de mantener informados, a través de distintas redes y medios, a la comunidad, local y nacional, del acontecer de un club que estuvo al borde de desaparecer.
“Hay un equipo de comunicaciones grande, cuando empezamos una semana encerrados, me grababan una y otra vez, sácate esa muletilla me pedían, no hables tanto, tres ideas. Tenemos hitos, la campaña, juntar casi doce millones, empezar los trabajos, ir a impuestos internos y decirle al director queremos pagar. Me escribió por internet un hincha de Concepción, magíster en derecho tributario, nos asesoramos y pagamos mucho menos de la cifra inicial”.
A la tarea de regularizar el tema con el SII, se suma también la labor de ordenar las cuentas en materia de previsión de salud. Tornería detalla que “tendremos que ir Isapre por Isapre viendo si hay deudas, lo más seguro es que aparezcan, algunas pueden estar prescritas, así que pronto, en menos de un mes tendríamos un club social que no le debe a nadie. En una conversación formal frente a la ANFP, tendríamos la espalda para demostrar que desde que nos desafiliaste, una de las instituciones que nos conforma, está limpia, no sé si ellos pueden decir lo mismo”, afirma.
Aunque de acuerdo al testimonio del presidente de los lilas, la cas comienza a ordenarse, lo cierto es que la situación económica sigue siendo adversa. “Está la deuda histórica del club que tenemos que pagarla, será el tema de la próxima asamblea, una responsabilidad que asumiremos frente a los hinchas. También está la deuda que dejó la concesionaria, la ANFP tiene que decirnos cuanto es. La ANFP, independiente de los errores de la concesionaria, nunca le dijo ni supo efectivamente cuánto, de los 1.800 millones se debía”.
Pero no todo ha sido autogestión, también han aprendido del trabajo que realizan otras corporaciones. “Una de las comisiones más importantes de Santiago Wanderers tiene que ver con historia, cultura y patrimonio, lo que nosotros no teníamos en nuestro plan. Lo agregamos de inmediato y hace dos semanas empezó a trabajar nuestro comité con el tema de copas, historia, campeonatos, vamos aprendiendo de todos”.
Trabajos colectivos inéditos
El espíritu colectivo que parecía casi extinto a partir de la administración de las sociedades anónimas deportivas volvió a sentirse en Concepción luego de esta crisis. De hecho, Tornería revela una anécdota que en su opinión muestra la voluntad de toda una ciudad en levantar nuevamente a la institución.
“Un fin de semana, un empresario hincha había arrendado una retroexcavadora, la tenía el fin de semana. Fueron cinco horas que sirvieron para hacer correr el agua del canal porque se nos estaba pudriendo la cancha de pasto, son 500 mil pesos que no tenemos. Lo más llamativo es que la gente agradece porque puede trabajar. Hay diseñadores que criticaban los afiches, ahora pueden ayudar, son responsables, responden bien. Nos contactamos con un centro de investigación de la Universidad de Chile y están interesados en el modelo de trabajo, que dicen es inédito”.
La suma de esfuerzos y personas les han permitido establecer asimismo, un equipo jurídico. “Cuando se nos fue el juicio a Santiago, necesitábamos un abogado allá. Escribimos en un grupo de Facebook de hinchas privado y en media hora habían contactado tres. Nuestro abogado en Concepción es Jorge Montecinos, peso pesado acá, se ofreció a trabajar y está feliz, haciéndolo gratis. Eso avanza y avanza, no sabemos donde va a parar”.
Incluso la esperanza de doblarle la mano al fallo del consejo de presidentes de la ANFP de desafiliar al club está presente. Un capítulo importante se vivirá este viernes cuando la Corte de Apelaciones de Santiago analice el recurso de protección presentado por los lilas. “Si ganamos, la ANFP irá a la Suprema. Si es al revés, nosotros iremos a la Suprema”.
Eso sí, por ahora la directiva prefiere trabajar con el actual escenario, que los tiene lejos del profesionalismo. “Hoy estamos en Tercera B, que comienza en febrero del 2017. En noviembre hay que presentar el cuaderno de cargos a ANFA, no sé si el amateur estará en condiciones de recibir al Conce. Ahora, si ganamos el juicio, es Primera B el otro año y habría que empezar desde ya a preparar el camino, hemos tenido reuniones con empresarios. Si hay que concensionar de nuevo, tendremos que encerrarnos un mes y hacerlo bien, ser el ejemplo. Si con el paso de los años se genera rentabilidad, fantástico, ellos ganan y nosotros también porque habría felicidad, seremos los mejores socios de quien llegue si son propositivos”, cierra Tornería.
Fotografía Twitter @CDSConcepción