Everton de Viña del Mar regresó al fútbol grande de Chile. El cuadro oro y cielo cayó por la cuenta mínima ante Deportes Puerto Montt pero el triunfo en la ida por 3 a 1 en Sausalito le entregó el boleto a Primera División.
Fue un duelo emocionante, una verdadera final. De arranque fueron los viñamarinos los que se generaron las mejores ocasiones de gol en los pies, principalmente de Maximiliano Ceratto, aunque Sebastián Pérez estuvo notable par evitar la caída de su pórtico.
Se veían mejor los oro y cielo, pero poco a poco, Puerto Montt comenzó a empujar y estuvo cerca de anotar a través de José Martínez, aunque Gabriel Díaz la sacó en la línea cuando Dalsasso miraba.
Sobre el final de la fracción, nuevamente Everton tendría algunas opciones de contra a través de la velocidad de Ceratto, pero el puntero no logró dar con el arco de Sebastián Pérez.
En el complemento la tónica siguió similar. El local empujaba y Everton apostaba por la contra. En los 67′ llegaría una gran opción para los “hijos del temporal” cuando Joaquín Díaz quedó frontal en posición de remate, gatilló pero Gabriel Díaz, de forma notable sacó en la línea cuando la primera diana era inminente.
Fueron los mejores pasajes de Puerto Montt que se fue con todo en demanda de la portería de Dalsasso, aunque la defensa oro y cielo se daba maña para evitar zozobras. En los 79′ Servín peleó un balón y Gabriel Díaz cometió mano dentro del área. El propio Servín desde los doce pasos no falló e instaló la ilusión de las 10 mil almas presentes en el Chinquihue.
Los últimos minutos fueron vibrantes. Los sureños martillaban y martillaban pero Everton resistía y resistía. Erwin Durán sufría al borde del campo y se molestaba con el juez Eduardo Gamboa, quien lo expulsó por reclamar.
Ya en los descuentos, con Sebastián Pérez jugado incluso en el área contraria en un balón detenido, Puerto Montt seguía batallando, ratificando que fue un rival más que digno en esta final.
Así cayó el telón del partido y también de una nueva temporada de Primera B. Everton, con justicia por lo hecho en el primer semestre y por la jerarquía que demostró en la final, se instala con justicia en el futbol de honor. Puerto Montt en tanto, se queda con el sabor amargo de estar a un paso de la gloria, pero con las expectativas más que superadas en su año de retorno a la división.