El empate sin goles en el partido de ida disputado la semana pasada en La Portada de La Serena hacía prever un partido duro, trabado y de mucha fuerza. Ambos equipos tenían la convicción de ganar y salieron a demostrar ayer por la tarde, en la cancha de Sausalito, que no regalarían nada.
El inicio del encuentro fue trabajado, ninguno de los dos elencos conseguía hacerse con el dominio del balón aunque era la oncena papayera la que lograba llegar más cerca de la portería defendida por Claudio González. Primero un desborde de Mario Briceño cuando recién se iniciaba el partido, luego en los 21 minutos, Guajardo remató en buena posición pero su remate se fue muy elevado.
Recién en los 23 apareció la escuadra de Víctor Rivero, luego que Gabriel Díaz no alcanzará a conectar el centro enviado al área; presto estuvo Hartard para eliminar el peligro.
Tras esta jugada vino el momento que quizás marcó el partido, Giovanny Campusano controló un balón en la salida y echó a correr el balón un poco largo, a su encuentro salió Fernando Saavedra, ambos con mucha fuerza, el choque dejó consecuencias graves para el serenense, que resultó con fractura de tibia y peroné y estaría al menos seis meses fuera de las canchas, mientras que el juez Enrique Osses mostró la cartulina roja al jugador oro y cielo. Descontrol en ambos equipos pero el duelo logró volver a la calma y se siguió el partido.
Con un hombre menos las cosas se veían cuesta arriba para el cuadro local, pero el visitante, afectado quizás por el fuerte golpe anímico de la lesión de Campusano, no logró aprovechar la ventaja numérica y prácticamente no generó peligro. Más aún, fueron los viñamarinos los que se pusieron en ventaja gracias a un gran remate de Felipe Salinas que encontró fuera de posición al meta granate y a cobrar cuando corría el minuto 47 de la primera parte (se jugaron nueve de descuento).
Para el segundo tiempo, Luis Musrri envió a la cancha a Juan Carlos Maldonado por Alan Muñoz con la intención de generar mayor profundidad pero Everton mantenía la solidez defensiva que mostró en gran parte del torneo y no perdía la calma a pesar de la presión visitante. En los 60, Musrri envió al campo de juego a Joaquín Montecinos; el cambio resultó clave ya que fue este mismo quien siete minutos más tarde y tras gran jugada personal, quien derrotó a González que dejó libre el primer palo.
Parecía que el duelo se acercaba a los lanzamientos penales, pero Rivero tenía aún una última carta y en el minuto 74 envió al talentoso delantero trasandino Maximilano Ceratto al gramado verde. Tras un minuto en cancha, se juntaron Viotti y Ceratto, y el volante quien aprovechó para convertir el segundo del local y desatar la algarabía total para la hinchada oro y cielo que llegó en masa a Sausalito.
La Serena se vio golpeada luego del gol y a pesar del ímpetu no logró generar peligro. El local mantuvo su ordenamiento defensivo y consiguió mantener la ventaja hasta el final del encuentro. Para la estadística la cartulina roja que recibió Joaquín Montencinos en el minuto 92.
Campaña perfecta como anfitrión para los de Viña del Mar que les significó quedarse con la liguilla de la primera rueda y asegurar un cupo para la final por el ascenso que se disputará en Mayo. Los ruleteros, que aún tienen la chance de ir por el primer lugar en la general que entrega el primer cupo a la Primera A, por el momento esperan al ganador de la liguilla de la segunda rueda, para disputar el segundo cupo de ascenso, en lo que seguramente será otra gran definición.
Los granates por su lado, deberán levantar cabeza y seguir luchando por las dos opciones que aún se mantienen en disputa para lograr el soñado retorno al fútbol grande.
