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Confirmando su amplia paternidad sobre Curicó Unido, Rangers de Talca se impuso por la cuenta mínima en duelo jugado en el estadio La Granja ante cerca de 2.700 espectadores.
Por campañas, el cuadro albirrojo llegaba como favorito a este compromiso. Sin embargo, el elenco que dirige Germán Corengia, en ningún momento – pese a terminar con dos hombres más en cancha – tuvo los argumentos suficientes para inquietar al golero Ezequiel Cacace.
La semana del piducano no había sido tranquila. Reuniones a puertas cerradas entre la directiva y el plantel y una conversación aparte con el técnico Carlos Rojas, marcaron el post duelo con Lota Schwager. Es que la presentación frente a la “lamparita” encendió todas las alarmas y generó la preocupación en los diferentes estamentos del club, que lucha por la permanencia en la Primera B.
Y como si los jugadores asumieran que no pueden escribir la página más triste en la historia de la centenaria institución, saltaron al gramado del reducto curicano con otra actitud y también prácticamente con otro equipo en relación al choque con los mineros. Sí, porque el “Chifi”, realizó siete cambios respecto de ese duelo.
Pero no se trató solo de actitud, también hubo aplicación, sobretodo en la última línea, con Bruno Romo y Wladimir Herrera entregando una solvencia de la que Rangers ha carecido a lo largo de toda la campaña. En el medio, el todoterreno José Luis Cabión, repartía guapeza y ganaba cuanto balón pasaba por su zona, imponiendo jerarquíay transmitiendo coraje a sus compañeros, que se impregnaron de la mística del mejor de la cancha.
Así cayó el único tanto del compromiso. En los 26′, un balonazo largo de Romo, encontró destapado a Pierani. El atacante desbordó, metió un centro y con ayuda de Jorge Aquino, quien desvió el balón, decretó el que a la postre sería el único tanto del partido.
Curicó no encontraba respuestas y Rangers seguía aplicado en el fondo, por lo que no extrañó que se fueran al descanso con la mínima ventaja para el visitante. En el complemento, la tónica seguía siendo la misma, Curicó intentaba solo con balonazos largos que siempre encontraron la cabeza de una zaguero rojinegro o la solvencia de Cacace.
De hecho, fue la visita la que tuvo las ocasiones más claras para estirar el marcador. Luca Pontigo en el arranque del segundo tiempo falló en un mano a mano en el que estuvo notable Leyton. Poco después, Cabión remató de distancia pero otra vez respondió el golero del dueño de casa, que también tendría una contención brillante ante un cabezazo abajo de Romo, que contuvo a medias con un manotazo salvador.
Rangers controlaba el partido, Curicó se desvanecía en ataques frontales, pero los rojinegros se complicaron absolutamente solos. Cuando se disponía a ser sustituido, en el minuto 73.. Álvaro Ormeño realizó un gesto obsceno a los hinchas curicanos. El cuarto juez advirtió a José Miguel Campusano, quien no dudó en expulsar al volante, que hasta ese momento desarrollaba un correcto partido. Una torpeza.
Poco después, en los 81′, Rangers aumentaría el sufrimiento. Bruno Romo, por insultos vio la cartulina roja directa y la visita se quedó con nueve. Pero el conjunto de Rojas no se amilanó, siguió aplicado en la última línea y finalmente rescató tres puntos que a esta altura valen oro. De paso, le propinó la tercera caída en línea a Curicó, que comienza a despedirse de la lucha por el ascenso.
Con este resultado, jugados 45 encuentros en el profesionalismo, Rangers estira sus números azules sobre su vecino del norte del Maule. Los números indican 29 triunfos para los piducanos, 8 empates y 8 victorias de los “torteros. En la próxima fecha, los talquinos recibirán a Santiago Morning, mientras que Curicó se medirá con Lota Schwager.
