Su presencia en el partido ante Deportes Santa Cruz estuvo en duda. Jaime García, cerebro de la gran campaña de Ñublense en la temporada 2020 de la Primera B, sorteó días difíciles. Contagiado de Covid-19, debió ser hospitalizado. No lo pasó bien pero logró salir adelante. Pese a que recibió el alta hace poco, no quiso perderse el retorno del rojo a la competencia tras la cuarentena a la que fue sometido el plantel.
Su escuadra no defraudó. Se impuso 3 a 1 a Deportes Santa Cruz y está muy cerca de regresar a primera división. El título y ascenso parece inminente. “Contento por el regreso, 14 días muy difíciles, no pudimos hacer casi nada en una semana, muy poco entrenamos pero la disposición del grupo es tremenda, la complicidad que tenemos entre todos los que trabajan en el complejo, entonces, se ve reflejado en esto”, comentó en diálogo con CDF.
“Se reafirma que lo que nosotros nos proponemos como grupo lo podemos hacer, podemos jugar bien, mal o regular pero nosotros somos un equipo muy humilde, muy centrado, trato que ellos tengan un equilibrio también fuera de la cancha. Son complicados, tengo que andarlos vigilando, parezco GPS pero es parte de lo que yo sabía de armar un grupo así, pero son locos lindos, asumo el riesgo”, agregó.
Sobre su experiencia con el Covid-19 comentó que “lo iba a conversar mucho con familia a ver si seguía esto o no lo seguía, si valía la pena perder la vida con todo lo que está pasando y que la gente no cree. Me tocó, la viví fuerte y dura, al pasar los días creo que vale la pena tomar el riesgo sobre todo por la complicidad que yo tengo con la gente de Chillán, tengo una responsabilidad grande y tenía que estar“.
Reconoció además que “la viví muy negra, Dios me dio esta posibilidad de estar acá, lo que tanto me gusta… me dan una enseñanza de vida la gente de la salud porque ellos no te conocen, no saben quien soy, no les interesa, pero ellos lo único que hacen es poder salvar la vida, se juegan la vida estando en esa posición, hay mucha gente que está a honorarios, que corre mucho riesgo por tan poco y eso también hay que decirlo, la gente que está arriba y que solamente mueve el dedo en el sillón, no sirve, hay que estar donde las papas queman”.
Entre los jugadores, además de la satisfacción de contar nuevamente con su estratega, la felicidad por este nuevo paso hacia el retorno a Primera División quedó reflejada en las palabras de Luis Valenzuela, quien también dialogó con el Canal del Fútbol.
“Sabíamos que iba a ser un partido bastante difícil, tuvimos dos semanas complicadas, encerrados, dos semanas sin entrenar normal en una cancha, sabíamos que la parte física nos podía pasar la cuenta, gracias a Dios estuvimos bien, estuvimos a la altura””.
“Sabíamos que estos tres puntos eran muy importantes para lo que queremos todos, que todos saben que es el campeonato”, cerro el mediocampista del rojo.
Ñublense con su conductor superando un complejo momento, está muy cerca de la gloria.
Imagen de archivo.
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