Es la gran figura que tiene Magallanes. Llegó a Chile a comienzos del 2019 a prueba en Universidad Católica para luego emigrar a la “Academia”. El colombiano Yorman Zapata está abriéndose un espacio en el fútbol chileno. Condiciones tiene y de sobra.
Por lo mismo, era interesarte conocer un poco más de este atacante de 20 años, a quien contactamos para una amena conversación en la que contó como se dio su llegada a Chile, sus sueños en el fútbol y porqué no, incluso la opción de nacionalizarse chileno.
En ese sentido, Zapata relató que “yo jugaba en mi pueblo, de ahí me llevaron a una escuela que se llama Néstor Otero, me llevaron allá a jugar un torneo cadete y un representante de Cali se comunicó con el señor que me llevó a jugar a Cali, estuvieron hablando, jugué en octubre y estuve hasta diciembre del 2018, me fue bien y ahí hablaron para hacer unas pruebas en Católica”.
“El 5 de febrero (2019) llegué a Chile, el 6 de de febrero hice mi primer entrenamiento en Católica, hicieron una práctica y me vieron jugar, me fue bien, al otro día contra Recoleta, ahí jugamos, ganamos 3 a 2, me fue bien, como a los tres días me inscribieron en la juvenil, empecé a jugar como desde la octava fecha y como a la once fecha me consagré en el equipo titular, en el cadete, gracias a Dios me fue bien, le ganamos a Everton y hasta que terminó el campeonato, jugué de titular, salimos subcampeón, en esa final perdimos contra Colo Colo, yo hice los dos goles de Católica. Después, jugamos un torneo que se llamaba la Copa Var, salimos campeones, le ganamos a Colo Colo y en agosto don Cristian (Ogalde) se interesó en mi y me trajeron a Magallanes”.
Recordó también lo difícil que fueron sus primeros días en Chile. “Es muy duro estar lejos de la familia, me pasaban miles de cosas por la cabeza, yo tenía 18 años, quería estar en la calle, habían reglas (en la casa de cadetes de Católica), eso me costó harto porque la señora que vivía con nosotros ahí, tenía un horario para todo, yo no estaba acostumbrado a eso, pero yo sabía lo que quería, me acostumbré, fue difícil pero lo pude soportar”.
Respecto a una eventual nacionalización, Zapata comentó que “lo he conversado con mi familia si llega la oportunidad, les he dicho que sí, que me gustaría y ellos me dicen que si, que me apoyan, pero que vaya paso a paso, primero una cosa, después ver si me puedo nacionalizar, pero que si me dan la oportunidad, que lo haga, porque el país fue el que me abrió las puertas, lo hemos conversado, les he dicho que sí, que me podría nacionalizar chileno. En el 2023 podría nacionalizarme“.
En ese mismo sentido, se ilusiona con jugar en el extranjero y porqué no, vestir la casaquilla de la selección chilena. “Mi sueño es jugar en la liga española, en el Atlético de Madrid o en el Sevilla, si llegó allá es mi sueño cumplido…si las cosas siguen de la mejor manera y sigo mostrando cada día un mejor nivel en la cancha, contentísimo, cualquier jugador estaría orgulloso de vestir la camiseta de un país”.
Por último, agradeció todo el respaldo que ha recibido en Magallanes. “Me abrieron las puertas, empecé desde abajo, me llamaron cuando no era nadie, ahora estoy construyendo un futuro, en todo momento me apoyan, siempre voy a estar agradecido con la hinchada, siempre me mandan mensajes de apoyo”, cerró Zapata.
Puedes revisar la entrevista completa aquí.
Fotografía Prensa Magallanes/Daniel Orellana.
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