La hinchada de Valdivia en alerta tras la salida de Gandarillas: “A Salazar ya lo vivimos, fue una experiencia de no avanzar ni crecer”

Tal como lo reveló en conversación con Primera B Chile, José Gandarillas ya mira desde lejos a Deportes Valdivia. Su intempestiva salida de la presidencia del “Torreón”, lo llevó a transformarse en un accionista pasivo. Aunque no se alejará del fútbol, si observará desde la distancia el desarrollo de la institución.

La junta de accionistas que sesionó el pasado lunes, determinó que Jorge Salazar, actual presidente de la Corporación -entidad que controla el 25% de las acciones del “Torreón”, vuelva a ejercer como timonel del club.

Todos estos cambios han generado un estado de alerta y preocupación entre los hinchas albirrojos, que recuerdan el primer paso del dirigente, con mucha amargura. Los mensajes en redes sociales están a la orden del día.

Es que claro, lo que más preocupa a los hinchas es el regreso de Salazar, de quien no tienen un gran recuerdo de su primera gestión. “El personaje que ahora está de presidente solo colocaba obstáculos a Pepe Gandarillas, teniendo los contactos como para aportar”, afirma Miguel Molina, un histórico hincha de Deportes Valdivia, miembro de la agrupación Centro Cultural y Deportivo Valxlluvia.

“Como presidente de la corporación, no ha justificado 50 millones de pesos que están dando vuelta, sin dejar de mencionar que el club está totalmente saneado, sin deudas y con las arcas llenas. Por lo mismo, el señor Salazar estará en el ojo de todos si se cambia el accionar del club”, agrega Molina.

Desde la perspectiva de Molina, quien además integró en su momento las series menores del club y alentó al mismo cuando se llamaba Real Valdivia, Deportes Las Ánimas, Regional Valdivia y Deportes Valdivia, la gestión de Gandarillas significó un salto de calidad para la institución.

“Fue cercano a la gente, llegó cuando no teníamos nada en Tercera B en 2012. Buenísimo el legado y avance del club de parte de Gandarillas y la gente que lo rodea. La decisión de elegir a Salazar es algo que ya vivimos y fue una experiencia de no avanzar ni crecer”, manifiesta.

Respecto al futuro, el acérrimo seguidor del “Torreón” tiene claro que no hay que desviarse del camino ya trazado. “La nueva directiva debe seguir con lo que se estaba haciendo, Gandarillas estaba en busca de un terreno para el complejo deportivo del Torreón y las series menores. Lo del estadio es una batalla perdida con las autoridades, pero ahora como todos son amigos de Salazar, capaz que se muevan”.

“Como hinchas sabemos que todos pasan, para bien o para mal, pero podemos demostrar nuestro descontento en cualquier momento y como socios es una de las trampas de Salazar, ya que se perdió el libro de socios del 2009 y los que votaron pagaron dos meses y pudieron elegir, dejando a los más antiguos fuera y con una mala práctica. En fin, Salazar, cuando estuvo no había avances, sueldos impagos, pensiones y cabañas atrasadas. No le gusta recibir ideas de trabajo, deseo por el “Torreón” que haya cambiado”, remata Molina.

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