A lo largo del torneo de transición, la gran deuda de Unión San Felipe estuvo en casa. De hecho, solo en la última presentación, ante Ñublense, consiguió celebrar. Fue triunfo por la mínima diferencia.
El partido no tuvo grandes emociones, pues prácticamente nada, había en juego. San Felipe no corría riesgo de descenso y Ñublense, salvo una catástrofe inédita en el fútbol podía comprometerse.
En el primer tiempo, las ocasiones fueron escasas y sin grandes peligros remató la fracción inicial. Ya en el completo, a través de un notable cabezazo de Héctor Vega, el Uní-Uní se puso en ventaja.
El mediocampo le pertenecía al conjunto del Valle del Aconcagua, en especial gracias al trabajo de Galeano, Cisterna y Pio, quienes tuvieron un más que correcto desempeño. Fue justo la celebración del Uní-Uní, por cuanto propuso más que Ñublense durante el compromiso.
Eso sí, las campañas de ambos quedaron al debe. Los dos se salvaron en las últimas fechas del descenso y vienen hace un par de temporadas peleando en la parte baja de la tabla. Mucho habrá que reformular en estas instituciones si quieren ir por un ascenso durante la temporada 2018.
San Felipe bajó el telón a la temporada 2017 con un triunfo sobre el pálido Ñublense.
Fotografía www.unionsanfelipe.com
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