Hubo ambiente en Arica. Durante el torneo de transición, San Marcos convocó generalmente cerca de mil quinientas personas. La campaña y la escasa posibilidad de saltarse la definición explican en cierta medida las bajas asistencias.
Pero hoy fue distinto. La gente llegó en buen número a presenciar el duelo de ida ante el campeón de transición, Unión La Calera. En las afueras del recinto el soldado ariqueño nos contaba su historia- se quejaba de que ya no lo dejaban entrar a cancha, en una más de las medidas sin sentido que se han adoptado en el último tiempo en nuestro fútbol– mientras los hinchas de ambos equipos daban muestras de un comportamiento ejemplar, compartiendo sin ninguna animosidad a la espera del compromiso.
Y así arrancó el partido. Fuerzas parejas en el primer tiempo. Con un San Marcos atento a no cometer los errores que le costaron el tres a uno frente a los cementeros en la penúltima fecha del campeonato.
En las gradas, la hinchada local sufría con el desempeño de Enzo Ruiz, incluso un error del defensa propició una de las más claras de la primera fracción; le quedó el balón a Rafael Viotti y Nicolás Peranic se jugó la vida para evitar la apertura de la cuenta.Poco más dejó el primer tiempo.
En la segunda mitad, el compromiso tuvo una tónica diferente. Los ariqueños salieron con todo y avisaron de inmediato. Matías Grandis remecía el horizontal de Claudio González cuando amanecía el complemento. La pelota se paseaba por el área cementera hasta que cayó el tanto de Leonardo Olivera, quien capturó un centro de Michael Silva y destapado con certero cabezazo superó a González. Mérito para un artillero, que para muchos fue relegado durante el transición sin razón al banco de suplentes (no arrancaba de titular desde hace 10 partidos). Quizás por eso el abrazo a su pequeño, Bautista que en las gradas miraba en los brazos de su madre, Yasna, el desempeño de su progenitor.
La noche de Olivera pudo ser de ensueño; tuvo el segundo en un mano a mano pero se impuso el “halcón” González en el achique. Los cambios caleranos no daban resultado, Astete, Piñones y Ortiz se iban a la cancha pero salvo balonazos, La Calera no se acercó en el segundo tiempo. En la contra podía caer el segundo…
En Arica en tanto Pereyra enviaba a Mathías Pinto por Campos López solo para hacer tiempo aunque se veía que el segundo estaba rondando.
Así se bajó el telón en la ida de la definición. La llave está abierta pero San Marcos, de la mano del postergado Olivera dio el primer golpe.
