En Talca tendrán, al parecer, que resignarse a estar un semestre más en la Primera B. Es que el equipo no prende, no saca resultados y no se vislumbra una salida rápida a este pésimo momento.
La presentación del sábado ante Coquimbo Unido fue una extensión del bajo rendimiento que los piducanos exhibieron en el tramo final de la primera rueda. Sin ideas, solo apostando al balonazo largo. Orellana y Comba huérfanos en ofensiva poco podían hacer ante la zaga pirata.
Coquimbo Unido tampoco ofreció mucho en la primera fracción aunque al menos tenía controlado al rojinegro, que se fue al descanso sin entusiarmar a las casi 2 mil personas presentes en el Fiscal de Talca.
En el complemento, el ingreso de Nino Rojas le dio mayor vigor a la ofensiva. El espigado delantero corrió y metió, ganándose el apoyo del público que lo mínimo que exige es actitud y amor por la camiseta.
Con mayor peso en ataque, Rangers se generó algunas opciones. La más clara en los pies de Sergio Comba quien de revés intentó batir a Gonzalo Mall, reemplazante del lesionado Franco Cabrera. Su disparo se fue por poco.
En los 62′ llegaría el primero de la jornada. Un tiro de esquina ejecutado por Albornoz encontró la cabeza de Nino Rojas quien logró pivotear. Comba la desvió y Crovetto rechazó tarde a juicio de uno de los asistentes, que consideró que la pelota había traspasado íntegramente la línea. Reclamos piratas y festejo talquino.
Paradójicamente, en desventaja fue cuando Coquimbo Unido se vio mejor. Liderados por Crovetto, los aurinegros empezar a hacer daño. Luis Aseff tenía trabajo y respondía incluso ante un cabezazo de Washington Torres, quien estuvo cerca de batir la resistencia del golero piducano.
Sobre el final del partido llegó la justicia. Tras un desborde de Crovetto, Kilian Delgado, quien vino desde el banco selló el definivo 1-1. Se jugaban 91′ de partido.
Con este resultado Rangers llega a 22 unidades, 13 menos que el líder Curicó. Coquimbo Unido es sexto, dos casilleros más abajo que los talquinos con 22 puntos.
