Por Luis Montenegro
Era sin duda el duelo más relevante de la cuarta fecha del torneo de Apertura de la Primera B 2013-2014. Frente a frente dos de los tres invictos de la división, uno de ellos con la delantera más goleadora del torneo y el otro con la única valla que se mantenía sin recibir goles en la competencia
San Luis y San Marcos prometían un partido atractivo en un Lucio Fariña casi lleno y ambos elencos no defraudaron, entregando un espectáculo que se cerró en el último minuto del tiempo reglamentario con un soberbio tiro libre del argentino Diego Auzqui.
Los dos equipos presentaban bajas relevantes. Aunque ciertamente era la visita la que venía más diezmada: las ausencias de Eric Godoy, Miguel Coronado y Nicolás Medina se sumaron a la de Joel Estay y a un Renato González que jugó a media máquina. El local por su parte lamentaba la lesión de Matías Campos López, aunque pudo debutar el argentino Alejandro Fiorina, quien todavía presenta una leve lesión en uno de sus pies.
Antes de cumplirse dos minutos de juego San Luis tuvo la primera gran oportunidad de abrir la cuenta. Borrego lanzó un pase profundo que Pedrozo enredó entre sus piernas dejando habilitado en solitario a Oyaneder, pero el espigado atacante canario no definió con precisión ante la salida desesperada de Carrizo.
De ahí en más no hubo grandes oportunidades de gol en ninguno de los dos arcos en la primera mitad. Un par de remates violentos de Martínez a las manos de Carrizo se anotan como las únicas posibilidades de los primeros 45 minutos, marcados principalmente por la disputa en el mediocampo y el nerviosismo de ambas escuadras, que tácticamente trataban de sorprenderse una a otra.
La segunda mitad del cotejo se jugó casi completamente a una puerta. Marcoleta apostó a su conocido libreto defensivo, cediendo el terreno al cuadro local y apostando al error de los canarios para contragolpear con rapidez. La salida de Renato González complicó a los bravos del morro, mientras que el cuadro de Ponce intentaba una y otra vez romper el cerrojo defensivo impuesto por el estratega visitante.
Entrado ya el segundo tiempo, vino un tiro libre que sería un anticipo del epílogo del cotejo. Diego Auzqui tomó el balón desde la derecha del ataque canario y complicó a Carrizo. Los canarios intentaban con el ingresado Fiorina, que tuvo un cabezazo que pasó muy cerca, Borrego y Martínez, pero no podía, desnivelar. A esas alturas, el empate parecía ya firmado, y muchos hinchas se hacían la idea de que la única manera de terminar victoriosos sería con un balón detenido.
Y así fue. Último minuto de tiempo reglamentario y luego de un foul en el borde del área, Diego Auzqui dibuja una obra de arte, clavando el balón en un rincón imposible para el excelente Carrizo. Estalla la galería y los canarios se inscriben con propiedad como los punteros exclusivos del torneo con campaña perfecta en sus primeros cuatro cotejos.
Los canarios ahora se trasladarán al puerto de Coquimbo para enfrentar a Deportes La Serena, mientras que San Marcos recibirá a Coquimbo Unido en la cancha tres del Carlos Dittborn.
