El puesto de arquero es, sin duda, uno de los más complejos. En un segundo se puede pasar del cielo a la tierra, de héroe a villano. Ejemplos hay por doquier.
Es lo que le ha tocado vivir en el último tiempo a Gabriel Castellón, golero formado en las divisiones menores de Santiago Wanderers, quien debe convivir con una dura realidad: suplente en el pórtico caturro.
En 2014 le tocó debutar en el pórtico del Decano. Actuaciones correctas le permitieron abrirse un espacio, hasta que jugando ante Colo Colo en el Estadio Monumental, tuvo una presentación para enmarcar.
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Incluso sería considerado durante las clasificatorias al mundial de Rusia para los partidos ante Colombia, como visita y frente a Uruguay, de local, sin ver acción en esos compromisos. También fue parte del equipo nacional que levantó la China Cup.
Pero el semestre pasado viviría el capítulo más amargo de su promisoria carrera. Responsable directo del descenso de Wanderers, con una jugada en los descuentos en la que la falta de coordinación con uno de sus zagueros le permitió a Rafael Viotti mandar la serie ante Unión La Calera a los lanzamientos penales, comenzaría a perder protagonismo.
El regreso de otro canterano, Mauricio Viana, lo situaría en un lugar en el que ningún arquero quiere estar: considerado como el segundo. Es que las posibilidades de jugar para el suplente en esa posición, suelen ser escasas.
“Tratando de hacer todos los méritos para ser la opción en el arco. Con Mauricio tenemos una gran competencia, trabajando día a día para volver a jugar”, comentó Castellón en la habitual conferencia de prensa de los martes de los jugadores caturros.
“Es una experiencia que creo, a cada futbolista le toca vivir. Solamente sacarle el mayor provecho, entrenar, preparar para no cometer errores durante los juegos, tratando de sacarle el máximo provecho a todas las situaciones que se viven día a día”, agregó.
Respecto a la relación que mantiene con Mauricio Viana, el espigado golero detalló que “es excelente, profesional y fuera de la institución. Trabajamos en enfocarse en los fines de semana, como son los delanteros y la parte media del equipo rival, como puedo ayudar para que llegue de la mejor forma al partido y como él ayudarme a estar preparado en caso que me toque jugar. Para los dos es muy grato estar en una competencia, además es muy sana”.
Pero aunque alejado del protagonismo que significa ser titular, no pierde las esperanzas de proyectar su carrera. “El tema selección si es un objetivo para mi, para eso trabajo día a día y por eso tampoco dejo de luchar”, afirmó.
Ya en un plano global, el portero también se refirió al arribo de Moisés Villarroel a la banca de los caturros. “El trabajo que está haciendo Moisés es muy bueno, está plasmando la identidad del club, sabe muy bien lo que Wanderers representa, estamos tratando de tomarle todos los consejos. Inculcar la garra, el corazón, como es el wanderino”,cerró el hoy suplente en el arco del Decano.
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